El reto de iluminar la torre de control aéreo más alta del mundo

La iluminación de la fachada de la nueva torre de control del aeropuerto King Abdulaziz en Jeddah (Arabia Saudí), la torre de control aéreo más alta del mundo con 136m, fue uno de los proyectos más ambiciosos de Sagitario Lighting y, sin duda, uno de los más complejos en sus más de 30 años de historia. Para realizarlo, fue necesario fabricar y suministrar más de 400 emisores de luz con tecnología LED de muy alta eficiencia, los cuales fueron distribuidos en diferentes plantas y alturas de la torre de control. Actualmente gestionan cerca de 6.000km de fibra óptica de máxima calidad, en cuanto a alta transmisión lumínica y mínima atenuación, que dan servicio a más de 27.000 puntos de luz, distribuidos en diferentes áreas de la fachada.

Imagen: Sagitario Lighting

El principal objetivo de este proyecto era retroiluminar las diversas áreas acristaladas dibujadas en la fachada  de forma homogénea, con altos niveles de luz que resultasen visibles desde centenares de metros de distancia. Para ello, se consideró que los emisores de luz estuvieran equipados con electrónica de control DMX, que permite gestionar el nivel de intensidad y la secuencia de encendido de cada área, conjuntamente con la información recibida de un sensor crepuscular instalado en lo alto de la torre de control. Este sensor indicaba de forma autónoma y automática el inicio y el fin de la puesta en marcha de todo el sistema de iluminación. Una de las características identificadoras del proyecto fue la intención de plasmar las diferentes fases lunares del mes, esculpiendo medias lunas de varios tamaños en las áreas a iluminar.

Imagen: Sagitario Lighting

El sistema de iluminación escogido para dar luz a la fachada de la torre de control del nuevo aeropuerto King Abdulaziz combina las ventajas de la tecnología LED (máxima durabilidad con mínimo consumo y mantenimiento, así como fácil control y regulación de la luz) con las de la fibra óptica (ausencia total de mantenimiento). Esta última ventaja fue un factor clave, debido a las restricciones, tanto técnicas como legales, de acceder a la fachada una vez completada su construcción.

Debido a la gran envergadura del proyecto, el equipo técnico de Sagitario Lighting se hizo cargo de la formación del personal responsable mediante un training de gestión e instalación del producto en obra. Asimismo, y una vez finalizada la instalación, la compañía se ocupó de la puesta en marcha de todo el sistema de iluminación, incluyendo la programación de escenas y efectos bajo el protocolo de control DMX, siguiendo las indicaciones y requerimientos del cliente.